El estreñimiento es un problema muy común en la infancia, el cual generalmente puede causar dolores estomacales, malestar, dificultad al momento de la evacuación, barriga hinchada, entre otras molestias.
Como padres antes una situación así podemos sentirnos abrumados y preocupados al no saber cómo poder ayudar a nuestros pequeños, por esta razón, hoy les traigo algunos consejos que podrían ser de mucha ayuda.
Para empezar, es súper importante identificar la causa del por qué el niño se estriñe, analizando así diversos factores como:
- La alimentación: Provocado por un escaso consumo de alimentos ricos en fibra, la ingesta de alimentos altos en grasas, comida procesada y no beber agua.
- Estrés: Factor emocional que puede influir por situaciones poco agradables o que sean nuevas para nuestros pequeños, tales como: iniciar la etapa escolar, proceso de separación de los padres, vergüenza por ir al baño, etc.
- Aguantarse: Esta situación puede presentarse en los niños que están aprendiendo a ir al baño solos.
- Tendencia natural al estreñimiento: Es decir, por más esfuerzos por evitar que se estriña no se consigue una deposición regular.
Entonces, ¿cómo puedo evitar que mi hijo se estriña?
EMPIEZA CON UNA BUENA ALIMENTACIÓN
Está comprobado que el consumo de alimentos ricos en fibra, grasas saludables, alimentos con alto contenido de agua, alimentos ricos en probióticos, y sobre todo el consumo de agua natural garantizará un buen tránsito intestinal, logrando así combatir o mejorar el estado de estreñimiento en los niños.
A continuación, mencionaré algunos alimentos que cumplen con lo antes mencionado y que podrías brindarle a tu pequeño en cantidades moderadas y de acuerdo a su edad:
Papaya

- Rica en fibra.
- Puede ser consumida sola o en jugo.
- Regula el tránsito intestinal.
Pitahaya

- Rica en fibra.
- Mejora problemas intestinales como el estreñimiento.
- Antiinflamatoria.
Manzana

- Reguladora intestinal.
- Rica en fibra.
- Ingerirla con cáscara para potenciar sus efectos.
Ciruela

- Ayuda al intestino a activarse.
- Es laxante.
- Rico en fibra.
Kiwi

- Alto contenido en fibra.
- Rico en agua.
- Ayuda a la digestión.
Aceite de oliva

- Laxante suave.
- Puede ser tomado en ayunas (una cucharadita) o mezclarlo en comidas.
- De rápida actuación.
Semillas de lino

- Favorece la movilidad intestinal.
- Posee gran cantidad de fibra.
- Facilita la evacuación.
Semillas de chía

- Mejora el ritmo de las deposiciones.
- No irrita las mucosas intestinales.
- Alto aporte de fibra.
ESTABLECE UNA RUTINA
Dale la oportunidad de establecer su propio tiempo para ir al baño, puede ser al levantarse en la mañana, después de almorzar, antes de ir a dormir, etc.
MOTÍVALO A PRACTICAR ALGUNA ACTIVIDAD O DEPORTE
Puede ser algo tan sencillo como caminar, correr, saltar, montar bicicleta, o cualquier opción que se adapte a sus capacidades, lo importante es que no caiga en el sedentarismo.
AYÚDALO A RELAJARSE
Normalizar el tema de ir al baño y satisfacer nuestras necesidades biológicas será de mucha importancia para que nuestros hijos se familiaricen con el tema como algo normal, así evitaremos que se aguanten o se sientan avergonzados, consiguiendo que se relajen en el momento y puedan evacuar con tranquilidad.
PROPORCIONAR UN SOPORTE
No es buena idea que tu pequeño quede colgando sus piernas en el sanitario, al contrario, podría provocar bastante dificultad para que pueda realizar sus necesidades, por eso lo recomendable es brindarle un soporte para que pueda apoyar sus piernas, como por ejemplo un banco pequeño, así podrá estar el tiempo que necesite en una mejor posición y comodidad.
Recuerda que, la alternativa natural siempre va a ser la mejor opción, evita el consumo de laxantes artificiales que pueden causar efectos negativos para nuestros niños con el paso del tiempo.
Si aún tienes dudas con respecto al tema o crees que tu hij@ puede estar atravesando por algo más complicado no olvides consultarlo con el médico pediatra para una respectiva evaluación.